El reciente incremento de ejecuciones en Nuevo León ha llevado a la Secretaría de Seguridad Pública del estado a revisar y aclarar los números registrados. Gerardo Escamilla Vargas, titular de la SSPNL, afirmó que muchos de estos casos corresponden a delincuentes abatidos en operativos de seguridad, lo que ha generado confusión en la percepción de la violencia en la región.
Durante una reunión con secretarios de Seguridad de los municipios metropolitanos, Escamilla Vargas destacó la importancia de establecer un sistema que permita a la autoridad federal distinguir entre homicidios dolosos y los abatimientos de criminales por parte de las fuerzas del orden. Con esta medida, el estado podría pasar de ocupar el primer lugar en violencia a la décima posición, según sus estimaciones, una vez que se eliminen estas cifras del conteo general.
El mes de septiembre se cerró con 133 casos de violencia y 25 abatidos en acciones de la policía. La SSPNL ha enfatizado que la Fuerza Civil no será omisa y se actuará enérgicamente para repeler cualquier intento de agresión por parte de grupos delictivos, especialmente en los municipios más afectados como Monterrey, García y Juárez.
